Una madre de familia denunció un presunto caso de negligencia médica por parte de médicos y enfermeras de las Clínica Materno Infantil Zapata y Clínica Materno Infantil ubicadas en la colonia Joaquín Colombres en la Ciudad de Puebla, luego de que a su hijo de tan solo tres años de edad, no pudieran controlarle una fiebre de 40 grados.
El hecho sucedió la noche del 26 de enero, pero fue hasta este día que la señora, Mariana, decidió romper el silencio y denunciar públicamente a estos centros clínicos tras poner en riesgo la vida de su pequeño.
A través de una entrevista a Urbano Noticias, Mariana, narró que esa noche su pequeño Diego, comenzó a presentar temperatura de 40 grados y una saturación de 91% y ante el riesgo de un posible contagio de COVID-19 decidió llevarlo a Clínica Materno Infantil Zapata, ubicada en la calle I. Zaragoza #50 en dicha colonia.
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“Llegamos a la clínica y la recepcionista me dijo que destapara a mis hijo pues tenía mucha fiebre, que me esperara y que iba a pasar al consultorio tres para que lo atendiera pero después me pasaron al 2 con el doctor Amirám Juárez Méndez, quien solo revisó sus pulmones y me dijo que era una infección leve” contó Mariana.
La madre de familia afirmó que se sintió con miedo al saber que solo el doctor le dijo que el diagnóstico era una gripe leve, ya que no le aplicaron una prueba de coronavirus, sin embargo pensó que estaba hablando con profesionales y aceptó el tratamiento que le dieron y procedió retirarse del lugar.
“Tomamos un taxi rumbo a casa, llegamos al puente de Colombres y mi niño comenzó a convulsionarse, el taxista nos regresó a la clínica pero obviamente si este doctor no supo atenderme una temperatura de 40 grados menos iba a atenderme una convulsión por eso me pasé a la Clínica Materno Infantil que está enfrente” detalló.
La mujer cuando llegó con su hijo, fue recibida por el Doctor Gutiérrez quien le dijo que es necesario colocarle oxígeno ya que tenía 77 por ciento de oxigenación, además de que debían canalizarlo y hacerle estudios de sangre para determinar la causa de la fiebre alta y las convulsiones.
“Yo llegué desde las 19:00 horas, momento único en el que vimos al doctor quien dijo que regresaría a revisar a mi hijo a las 9 de la mañana pero estuvimos más de 12 horas y nunca llegó, además de que la química que le sacó sangre a mi hijo, lo lastimó bastante con la aguja en los brazos y las piernas”.
Por esta razón Mariana decidió solicitar la alta voluntaria para retirarse a su casa por lo que le dijeron que sí y que sólo tenía que liquidar una cuenta de 4020 pesos, por solo estar internado una noche, tres inyecciones y sin tener pediatra a lo que ella comentó que era un costo muy elevado.
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Ante estos hecho exige a las autoridades correspondientes investiguen el hecho pues cree que su hijo sobrevivió ante un decadente diagnostico, pues solo se quedó con el dictamen de que tenía Pablo una infección de la garganta porque nunca le dijeron algo más.
Foto: Especial