Señalan que la reducción de autobuses genera un riesgo más alto de contagio por COVID19, ya que sería imposible respetar la sana distancia.

Un nutrido grupo de granaderos y elementos de la Policía Estatal de Tlaxcala se movilizaron esta mañana por la manifestación de maestros que cerraron accesos a la Ciudad, a la altura del Trébol y la autopista. 

Los quejosos pertenecientes a las secciones 31 y 55 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) cerraron con un autobús en uno de los puntos; también usaron piedras y ramas. 

La situación generó caos vehicular y el enojo de automovilista; incluso hubo el intentó de un conductor por atropellar a los manifestantes. 

La presencia de los elementos de la policía llegó al punto varias horas después lo que ahuyentó a los quejosos.



¿Qué piden?

Los maestros afirman que el transporte proporcionado por el Gobierno de Tlaxcala a través del programa “Primero los Maestros” es insuficiente para el traslado del personal a los centros de trabajado; de hecho afirman que las unidades se saturan poniendo en riesgo a los trabajadores ante la pandemia de COVID19. 

Los profesores exigen a la Secretaría de Educación Pública del Estado (SEPE) frenar la reducción en el número de autobuses que los llevan a escuelas en zonas marginadas.

Tampoco se cumple con las medidas sanitarias al interior de las unidades, por lo que exigieron la mejora de este servicio a las autoridades educativas, por lo que este día dejaron a sus alumnos sin clases.

Explicaron que debe haber al menos otros 16 autobuses para poder cumplir con el aforo del 50 por ciento en el transporte que determinó por decreto el Consejo Estatal de Salud para evitar riesgo de contagios de coronavirus.

Para resolver el tema, exigieron la presencia de autoridades de la SEPE para poder tener una mesa de diálogo y encontrar soluciones.