Por: Luis Alberto González
Recuerdo qué en 1995, tras la devaluación más grande en México, en diciembre de 1994, el entonces Presidente Ernesto Zedillo Ponce de León, dijo esta frase: “Es que me dejaron el país sujeto con alfileres”.
¿Por qué hacer esta referencia histórica?
Pues porque a Claudia Sheinbam Pardo se enfrentará un escenario muy caótico, económicamente hablando, esa es la herencia que le dejará Andrés Manuel López Obrador que derrocho dinero y deja muy endeudado al país, lo que no genera certidumbre a los inversionistas nacionales y extranjeros.
Y hay que sumarle que nadie tiene visualizado cual será certeza jurídica para invertir en nuestro país, tras haberse consumado la Reforma al Poder Judicial y de la cual estaremos viendo los primeros resultados hacia finales de 2025.
Porque para el año 2026 será todavía más complicado para nuestro país ante la revisión del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá -TMEC- porque seguramente no será sólo una revisión simple, sino que habrá de entrarse en una nueva renegociación.
Pero aquí les dejo esta información de lo mal que se manejo el sexenio de AMLO.
FUGA DE CAPITALES
En lo que va de enero a junio de 2024 México ha registrado una inédita fuga de capital de 42,402 millones de pesos, esto de acuerdo con Grupo Base.
Tan solo el 17 de junio pasado, México perdió 5 mil 088. 21 millones de pesos,
En el periodo de enero-diciembre de 2020 huyeron capitales por un monto de 257 mil 238.52 millones.
De enero a noviembre de 2021 salieron 292 mil 291.44 millones de pesos, la cifra aumentó.
En 2022 salieron capitales por un monto de 5 mil 111 millones de dólares.
Y Para 2023 huyeron capitales golondrinos por una cantidad de 11 mil 273 millones de dólares
CAPITALES EN LA BOLSA MEXICANA
Hay que mencionar que en el primer semestre de este 2024 (enero-junio) los flujos de capital que había en la Bolsa Mexicana de Valores -BMV- cayeron en 2 mil 759 millones de dólares, siendo la mayor caída en los últimos 3 meses. Esta es la cifra más alta desde 2012.
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En el mes de junio tras al triunfo de Claudia Sheinbaum Pardo y los señalamientos de que “a como fuera se haría la Reforma del Poder Judicial”, salieron de la BMV 1 mil 217.8 millones de dólares, todo lo anterior con cifras del propio Banco de México.
DEUDA DEL GOBIERNO
Según Andrés Manuel López Obrador -AMLO-, durante la toma de protesta en el gobierno en 2018, mencionó que la deuda pública con Vicente Fox Quesada era de 1.7 billones de pesos y con Felipe Calderón Hinojosa, llegó a 5.2 billones de pesos, pero al término del gobierno de Enrique Peña Nieto, la deuda externa era de 10 billones de pesos, pero hay que recordar que AMLO en todo el sexenio ha repetido, una y otra vez la mentira que durante su gobierno no se ha adquirido más deuda.
Sin embargo, en el primer año de gobierno de esta administración, se adquirió una deuda de 0.71 billones de pesos; en 2020 también se adquirió deuda externa por 0.74 BDP; para el 2021 0.90 BDP; en 2022 en 1 BDP y para 2023, la deuda externa alcanzó un nivel récord: 1.23 BDP. Es muy importante hacer notar que las cantidades por año son independientes, es decir, la deuda por año es sumatoria y acumulable.
Para el 2024 la Cámara de Diputados autorizó la adquisición de deuda por 1.72 BDP, lo cual hará del 2024 el año con más adquisición de deuda por encima de los gobiernos de Peña Nieto, Felipe Calderón o Vicente Fox.
Es así qué, si Enrique Peña Nieto dejo una deuda de 10 billones de pesos, actualmente la misma, con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público -SHCP- a marzo de este año ascendía a 15 billones 434 mil 161.2 millones de pesos, que es más del 50 % y actualmente significa el 45.5 % del Producto Interno Bruto -PIB- de México.
En resumen, la deuda pública para el 2024 será del 19.4% de los ingresos presupuestarios, cuando a inicio de este gobierno era apenas del 9.5%. De igual forma, la deuda autorizada para 2024 será 3.5 veces mayor que la de 2018; el costo de la deuda en el PIB para el 2024 será del 3.7%, cuando en 2023 fue de 3.4% del PIB y el 2022, del 2.8% del PIB.
Hay que decir, que para 2024 el gobierno actual aprobó, todavía, un total de endeudamiento de 5.4% del Producto Interno Bruto (PIB), el más alto del que se tenga registro desde 2008, año en que se comenzó a medir este rubro.
La Secretaría de Hacienda -SHCP- estimó en marzo que la deuda pudiera incrementarse hasta un 5.9 % del PIB, lo que significaría una deuda 3 veces mayor a la que dejo Enrique Peña Nieto en su ultimo año de gobierno en 2018.
Lo que preocupa a los analistas financieros es que existe un alto déficit presupuestario del gobierno y que se puedan dar recortes en la calificación crediticia de la deuda soberana de México, todo lo anterior también ante la Reforma al Poder Judicial.
No se considera que pudiera haber una devaluación, como ocurrió en diciembre de 1994, pero la fluctuación del peso frente al dólar puede seguir depreciándose.
¿Que significaría un peso más devaluado?
Que las importaciones serían más caras en todos los productos principalmente en alimentos, granos y otras materias primas lo que conllevaría a una mayor inflación.
Además, que las exportaciones mexicanas sufrirían un deterioro y significarían menores ingresos para las empresas y para México, además que pudiera haber recortes en las fuentes de empleo, entre otros factores.
Lo cierto es que la deuda externa ha explotado y que este gobierno es el que más daño le ha causado a México, todo encaminado a tratar de concluir las megaobras, mismas que siguen sin generar ingresos al país y ser sostenible por sí mismas.
Lo real es que para el 2024, cada habitante en México tendrá una deuda de 126 mil 818 pesos.
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