También, recomendó al gobierno estatal de Puebla crear un organismo propio de medición de la pobreza, con el que se pudiera dar seguimiento a las enormes particularidades que tiene la entidad.
Miguel Calderón Chelius, coordinador de la licenciatura Ciencias Sociales de la Universidad Iberoamericana en Puebla, consideró que las autoridades morenovallistas emplearon una “política de simulación” para tener una mejor evaluación en la medición del Consejo Nacional de Evaluación en la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En conferencia de prensa, señaló que los gobiernos estatales —de 2012 a 2018– bajaron los indicadores de pobreza debido a que encontraron «mañas» como dar certificados educativos, afiliar a personas al seguro popular, o entregar láminas de asbesto. Y es que, comentó, dichos apoyos mejoran los indicadores que mide el Coneval, pero no resuelven la marginación.
Por ello, aseveró que la reducción de la pobreza extrema en un 50.9 por ciento que reporta el organismo no «es real», pues al observar otro tipo de mediciones como Evalúa se tiene que el porcentaje de personas en pobreza extrema y moderada subiría al 82.2 por ciento y no sería del 58.9 por ciento como refiere Coneval. Sin embargo, el académico se pronunció porque no se elimine el Coneval, pues es mejor corregir los defectos de su medición y renovar a los integrantes del Consejo, que regresar a una medición oficial atada a los intereses de cada administración.
También, recomendó al gobierno estatal de Puebla crear un organismo propio de medición de la pobreza, con el que se pudiera dar seguimiento a las enormes particularidades que tiene la entidad.