La especialista y sus colaboradores estudian las razones por las cuales las microalgas se reproducen sin control y generan florecimientos nocivos.
El cambio climático y el vertimiento de aguas residuales al mar hacen más frecuente los florecimientos de algas nocivas como las denominadas mareas rojas, destacó una investigación de la UNAM.
Lorena Durán, del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL), explicó que uno de sus objetivos es identificar el impacto de la contaminación de plásticos en las microalgas.
De acuerdo con Gaceta UNAM, existen registros fósiles desde hace 130 millones de años de las mareas rojas, y de hecho hubo muertes masivas de invertebrados por esa causa.
Se denominan floreciminetos algales nocivos (FAN) y pueden causar intoxicación en los peces, matan aves y pueden causar daños a la salud en las personas que llegan a consumir pescados y mariscos contaminados con las toxinas que producen.
«Entender cómo el cambio climático y la contaminación afectan a las microalgas, que son la base de todo lo viviente en el mar, nos ayudará a proteger el fondo marino, los arrecifes de coral y la columna de agua», puntualizó Lorena Durán.
La especialista y sus colaboradores estudian las razones por las cuales las microalgas se reproducen sin control y generan florecimientos nocivos. Realizan estudios específicamente en los mares del Caribe mexicano.
«Estamos dedicados a la identificación de especies de microalgas para determinar qué toxinas producen, qué tan tóxicas son y qué cantidad de éstas depende de su relación simbiótica con bacterias«, detalló.