Al menos siete estados se encuentran en sequía extrema en lo más fuerte de la temporada de estiaje y 39 por ciento de las 210 presas que monitorea la Comisión Nacional del Agua (Conagua) se encuentran por debajo de 50 por ciento de su capacidad total, lo anterior, en medio de una fuerte ola de calor que se ha registrado en casi todo el país.
De acuerdo con el Monitor de Sequía de México, hasta el 31 de marzo Tamaulipas presenta esta condición en 18.5 por ciento de su superficie; Michoacán, 16.9 por ciento; Nuevo León, 8.1; Hidalgo, 1.5; Coahuila, uno por ciento; Tlaxcala, 0.4, y Puebla, 0.1 por ciento. Datos de la Conagua señalan que entre marzo y mayo es la etapa más fuerte de estiaje en el país.
De los 210 embalses que monitorea la dependencia federal, hasta el 4 de abril 83 se encontraban por debajo de 50 por ciento de su capacidad total; de esas, 13 se encuentran en menos de 10 por ciento y cuatro se ubican en ceros.
La Llave y San Ildefonso, en Querétaro; Copándaro, en Michoacán, y Gonzalo Santos, en San Luis Potosí, presentan cero por ciento de llenado. La temporada de lluvias en el Pacífico comienza el 15 de mayo, mientras que en el Atlántico el 1 de junio.
Otros estados con sequía severa son Aguascalientes, Coahuila, Colima, Durango, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Nayarit, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Tlaxcala y Zacatecas.
En entrevista con La Razón, Marcelino Castañeda Navarrete, integrante de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, dijo que es necesario reforzar las labores de cuidado del recurso en temporada de estiaje, aparte que se debe invertir en infraestructura para aprovechar el agua de lluvia.
“La carencia del agua es de todos, por ello es necesario reforzar la campaña de difusión hacia la gente para evitar que la desperdicien, ya que son nuevas épocas donde hay una administración del recurso diferente”, dijo el perredista.
Señaló que en México y en el mundo se debe avanzar hacia otras formas de racionar el agua, pues a medida que pasan los años la escasez es cada vez mayor en ciudades, estados o colonias donde no existía, por ello, indicó que lo mejor es invertir en mejorar la red de agua para evitar fugas o desperdicio.
“Cada año estamos sufriendo más por el recurso y vemos que las presas están a la baja, por ello es importante adecuarnos a los nuevos tiempos, porque es un hecho que el tema de la escasez se va a seguir prolongando y si no sabemos como actuar ante esta nueva realidad que vamos a seguir padeciendo. Es necesario acostumbrarnos y ocuparnos de los que viene”, detalló.
Indicó que las autoridades deben administrar el recurso de mejor manera en épocas de estiaje, debido a que muchas de las presas no alcanzan a llenarse durante la temporada de lluvias y en la escasez, hay consecuencias para las poblaciones como cortes intermitentes o suministro por pipas.
Por ejemplo, el almacenamiento del Sistema Cutzamala (El Bosque, Valle de Bravo y Villa Victoria), que abastecen a una parte de la Zona Metropolitana del Valle de México, tienen, en total, 45.5 por ciento de su nivel de llenado, lo que representa una disminución de 0.9 por ciento con relación al 27 de marzo pasado, lo que demuestra que al paso de las semanas el agua va en disminución, incluso en entidades como la Ciudad de México o el Estado de México ya comenzaron a realizar cortes.