Esta tarde repicaron las campanas de la Catedral, así como de templos y capillas del interior del estado, en memoria de todas las personas víctimas de la violencia en México y por los sacerdotes jesuitas asesinados en la Sierra Tarahumara.

Aproximadamente a las 15:00 horas se invitó al repique de campanas por un minuto en todos los templos y capillas de la iglesia católica en el país.

Hace un año, Javier Campos Morales y Joaquín César Mora fueron asesinados por José Noriel Portillo Gil «El Chueco», luego de que trataron de rescatar al guía de turistas Pedro Palma, quien quiso resguardarse dentro de la parroquia de Cerocahui; sin embargo, también fue ejecutado.

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Por Irina Díaz

Reportera de Ciudad

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