La menor sufría violencia, fue abusada sexualmente y agredida por las personas que estaban a su cargo.

Luego de cuatro meses y ocho días en terapia intensiva, la niña Yatziri – «Yaz» – de 7 años de edad, falleció por las complicaciones que registró en su salud producto de un golpiza que le propinaron en el domicilio donde vivía.

La noticia de su muerte la dio el Gobierno del Estado de Puebla, a través de una esquela que publicó en redes sociales. Ahí se refrendó la postura de que su caso no quedará impune.

La niña fue ingresada el 20 de agosto en el hospital del IMSS de La Margarita en la capital poblana en estado crítico debido a una hemorragia interna, y el colapso de un pulmón, por golpes y abuso sexual,  de acuerdo a lo que informaron las autoridades. 



No obstante, después se supo que era el segundo ingreso de la niña por maltrato infantil, de acuerdo con lo que confirmó el propio IMSS. 

El Instituto notificó desde abril de 2020 a la Fiscalía General del Estado (FGE) sobre la situación de maltrato infantil, lesiones y agresiones contra «Yaz». El16 de abril fue la primera vez que se atendió a la menor y se hizo la denuncia a la FGE que derivó en la apertura de una carpeta de investigación.

Posteriormente, el 20 de agosto cuando la niña volvió a ingresar al nosocomio, se  aviso al Ministerio Público adscrito a la Clínica de Atención y Prevención del Maltrato, así como al DIF Estatal. 

Los datos del IMSS nunca empataron con los de la FGE, instancia que reportó a través de un comunicado que fue ddl 22 de agosto cuando la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia de Género contra las Mujeres, tomó conocimiento por parte del Hospital del IMSS de La Margarita, sobre el ingreso de la niña.

Cabe mencionar que Yaz fue intervenida quirúrgicamente porque, debido a los golpes, uno de sus pulmones colapso, además tenía una infección por una cirugía anterior además de múltiples lesiones.

Además el jueves 27 de agosto, cuando la Agencia Estatal de Investigación, cumplió en la capital poblana los mandamientos judiciales en contra de Rafael N. y Alejandra Viridiana N., padre y madre de Yaz.

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