Un grupo de mujeres se manifestó desde temprana hora frente al penal de San Miguel en la ciudad de Puebla para exigir trato digno para las visitas, así como para las internas y los reos.
También piden la destitución de María del Rayo Farfán, actual directora del reclusorio, ante la violación de derechos humanos y anomañías que persisten en el recito.
Según las denunciantes, hay dos custodios identificados como «Chucho» y «El Tilin» que abusan de su autoridad, y otros más de los que no dieron detalles, que son señalados por acosar a las visitas femeninas.
Se destacó que las revisiones que se realizan al ingresar no se ejecutan por mujeres o que estás son excesivas por lo que son tocadas de manera que se sienten vulneradas. «Nos toquetean», dijo una de las quejosas.
Las manifestantes, cubiertas de la cara con cubrebocas y lentes oscuros para ocultar su identidad, dijeron que hay muertes al interior de la cárcel debido a la mala alimentación que tienen los reos, la falta de atención médica y de medicamentos.
En las pancartas que cargaban se podían leer diferentes consignas, una de ellas fue para demandar el cumplimiento del «derecho a la correcta alimentación» de las personas privadas de su libertad.
Una de las quejosas dijo que solo puede visitar un día a la semana a su familiar y que ya no la dejan meter comida, por lo que «ya hay muchas muertes» debido a dicha situación.
Las mujeres, identificadas como madres, hermanas y parejas de personas ingresadas al área femenil y varonil del penal, indicaron que también se carece de un área de baños dignos y de agua, tanto para los internos como para visitas.
Según un documento dirigido al gobernador, Sergio Salomón Céspedes, así como las comisiones estatal y nacional de derechos humanos, también se realizan revisiones nocturnas a los dormitorios donde destruyen las pertenencias de los internos; abuso de autoridad; cobros indebidos por parte de custodios en las casetas internas y durante el pase de lista; se prohíbe ingreso de mujeres embarazadas y se restringe la visita íntima.
Otra quejas se relacionan con: impedir ingreso de materiales para trabajar; restricciones a actividades deportivas; y la exigencia a que familiares se uniformen para poder ingresar.
Las mujeres bloquearon por varias horas la vialidad frente al penal de San Miguel en ambos sentidos, por lo que se dificultó la situación, sobre todo para el transporte público. Al lugar se presentaron elementos de la Policía Estatal.
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