Las cárceles del país deben ampliar las medidas sanitarias “sin alegar falta de recursos”.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) pidió a las cárceles estatales garantizar el abasto de vacunas contra la influenza para presos, hijas e hijos de las mujeres privadas de su libertad, así como asignar ambulancias y dotar de manera ininterrumpida todos los productos de higiene, protección y sanitización permitidos sin alegar falta de recursos.
En un oficio dirigido a los sistemas estatales penitenciarios, la presidenta de la CNDH pide que se apliquen medidas cautelares, a fin de evitar que el repunte de COVID19 afecte a la población carcelaria considerada vulnerable.
Advierte que las personas privadas de su libertad es uno de los sectores más afectados durante la primera ola de contagios de coronavirus respecto al resto de la población.
De acuerdo al organismo, Tlaxcala es la cuarta entidad con el menor número de casos confirmados por coronavirus con tres casos positivos y una defunción, mientras que a nivel nacional hay 2 mil 674 casos acumulados y 234 decesos desde el inicio de la pandemia.
La CNDH considera población vulnerable a las personas adultas mayores y menores de 9 años de edad al interior de las cárceles, por lo que los estados deben garantizar el acceso a la información sobre la situación de la pandemia e informar sobre las medidas sanitarias indispensables.
