El 60 por ciento de las quejas no fueron atendidas debido a que la CEDH orientó a los quejosos.
Durante la pandemia las solicitudes de queja por presunta violación de derechos humanos disminuyeron 60.2 por ciento en Tlaxcala. Ese año, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) recibió 520 solicitudes de queja, de las cuales, solo en 212 asuntos abrió un expediente de investigación, es decir, 59.2 por ciento no fueron atendidas y sancionó solo a un funcionario público.
La CEDH es una de los 10 organismos públicos autónomos que abrió durante 2020 el menor número de expedientes de investigación por quejas, mientras que estados como Baja California, Coahuila, Campeche y otros abrieron expedientes por cada una de las solicitudes presentadas.
De acuerdo con resultados del Censo Nacional de Derechos Humanos en el Ámbito Federal y Estatal del Inegi, la CEDH orientó 268 de las 520 solicitudes de queja, es decir, no fueron clasificadas como «atendidas» porque la comisión optó por “asesorar” al quejoso a fin de que desistiera de la solicitud.
Según las cifras oficiales, la CEDH acumuló 418 expedientes de queja entre 2019 y 2020, de los cuales, calificó 343 como presuntos hechos violatorios de derechos humanos y concluyó 117, la mitad por conciliación y la otra mitad por falta de interés o desistimiento del quejoso, en solo un asunto emitió una sanción contra un funcionario.
El año pasado, marcado por la pandemia, las quejas solicitadas se relacionaron principalmente por la presunta violación a los derechos a la integridad y seguridad jurídica, la legalidad, por negativa de servir por parte de funcionarios públicos, por detención arbitraria y derechos de las mujeres; destaca dos quejas presentadas por periodistas, 103 por mujeres y 47 por adultos mayores.
