Después de más de 2 años de iniciar su denuncia ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje no consiguen que la empresa pague su liquidación.
La empresa SIMEC Internacional S.A de C.V despidió injustamente a más de 30 trabajadores de su planta ubicada en el municipio de Xaloztoc, Tlaxcala, por tratar de organizarse en un sindicato libre para exigir mejores condiciones de trabajo luego de que por más de 12 años no tuvieron aumento salarial, entre otras irregularidades.
Este día un grupo de tres extrabajadores, acompañados de su abogado Israel Cervantes, acudieron al Congreso del Estado para manifestarse y pedir la intervención de los diputados locales para que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) Especial número 46 atienda su demanda por despido injustificado interpuesta desde hace más de dos años y medio, la cual no ha prosperado a pesar de que tienen todos los elementos para acceder a la justicia laboral.
Incluso, reclamaron que los representantes de la JFCA no hayan podido notificado a la empresa SIMEC del procedimiento en su contra con el pretexto de la empresa cambia de razón social por lo que el actuario no da con la dirección del grupo empresarial, por lo que incluso pidieron al Gobierno Federal la remoción de los funcionarios de la junta federal y la llegada de otros que “si quieran hacer su trabajo”.
Israel Cervantes, explicó que la empresa, que se especializa en la fabricación de productos de acero (perfiles estructurales) para la industria de la construcción, aeroespacial, minera, naval, del transporte y automotriz, despidió hace más de dos años a un grupo de 30 trabajadores, a los cuales no les dio su liquidación conforme a ley a pesar de contar con 12 y hasta 25 años de antigüedad laboral.
Los extrabajadores relataron que la acción de la empresa fue en venganza por su intento de conformar un sindicato libre, a través del cual solicitarían mejoras a sus condiciones laborales, pues llevaban más de 12 años de trabajo sin recibir un aumento salarial, tampoco tenían condiciones dignas para realizar sus labores, estaban expuestos a accidentes, carecían de protocolos de seguridad, hubo empleados que perdieron extremidades, y sufrieron accidentes en la planta por la falta de elementos de protección, entre otras irregularidades.
“Quisimos hacer un grupo para hacer un sindicato que nos ayude a resolver este problema, pero cuando se dieron cuenta los de recursos humanos nos despidieron injustificadamente por querer crear un sindicato, o pertenecer a un sindicato.
Fueron más de 150 trabajadores los despedidos en ese momento pero solo 30 empezamos una demanda ante la Junta Federal pero no hemos podido emplazar a huelga a la planta porque cambia de razón social a cada rato cuando va el actuario no dan con la dirección”, comentan, por lo que consideran que los actuarios de la JFCA están coludidos con la empresa, y que lejos de defender a los trabajadores están ayudando a la parte patronal.
